El 14 de mayo de 2022, un hecho conmocionó a Beira-Rio. Durante el empate 2-2 contra el Corinthians, el centrocampista Edenilson, que en ese momento todavía jugaba en el Internacional, pidió la interrupción del partido alegando que Rafael Ramos, el lateral contrario, lo había llamado «mono».
Teniendo en cuenta el impacto de este caso, el jugador del equipo paulista que todavía estaba en el Gigante fue finalmente detenido y sólo liberado después de pagar una fianza de 10 mil reales. El jueves pasado, un año y medio después, el tribunal finalmente puso fin al asunto.
La decisión tomada por el Tribunal de Aficionados y Grandes Eventos del Foro Central fue absolver a Rafael Ramos del proceso por injurias raciales. Encargado de analizar el caso, el juez Marco Aurélio Martins Xavier explicó la decisión.
“Es imposible llegar a una conclusión segura de que los delitos del acusado son, de hecho, completos. Partiendo de la premisa de que la duda favorece al imputado, no queda otra solución que su libertad, considerando la falta de pruebas que indiquen prácticas delictivas cometidas en su contra”, afirmó el profesional del derecho.